05 febrero, 2010

A todos a los que les he fallado

Esto va dirigido a todos los seres humanos a los que una vez, por pequeña que sea, les he fallado. Esto va dirigido a aquellos a los que una vez solté la mano, a los que la vergüenza no me dejó ayudar, a los que la pereza me hizo olvidar, a los que la dejadez me hizo descuidar. Va dirigido a los que en el futuro dejaré tirados, a los que quedarán decepcionados, a los pobres, ricos o locos que conmigo queden enfadados.

Sois tantos... quizá podríais inventar un país maravilloso, un país donde no estaría yo para estar ahí, donde no os fallaría. Quizá sería una gran nación, numerosa y superpoblada, habitada hasta en sus rincones más oscuros.

No sé por dónde empezar. Perdón a todos, perdón a muchos, a muchas, a los hermafroditas y animales, también a las plantas y a los objetos inertes con alma. Gracias a los que a pesar de todo me seguís mirando a la cara, me seguís saludando, apreciando, abrazando o besando. Vosotros sí que sois maravillosos, sí que os merecéis la Luna.

No sé cómo seguir, lo siento, sé que debería haber llamado, pero me corté; sé que debería haber llegado, pero me dio vergüenza; sé que debería haber abrazado, pero parecía tan poco apropiado...; sé que debería haber saludado, pero parecía tan prohibido por el silencio reinante...; sé que debería haberme parado, pero pensé que iba a ser peor.

Lo siento, de verdad, sé que más os duele a vosotros mi fallo, pero mi corazón sigue roto en muchos pedazos, cada uno por cada uno de vosotros, por esas almas a las que un día fallé. Si pudiera volvería atrás y os daría a cada uno lo que os merecéis. Si tuviera lo que hay que tener iría ahora mismo a los que seguís vivos a pedir perdón, uno por uno, por mi error, por mis errores, por mi centenar de fallos, tonelada de pifias, terabyte de cagadas, año-luz de sinrazones...

Ahora utilizo cobardemente una bitácora que casi nadie lee, que algunos leéis, que está en un inmenso océano donde es una gota, para decir algo que a casi ninguno llegará, pero que es ya un buen acto de arrepentimiento, de contricción, de buena intención, de quizá irreprochable conducta. Quizá algunos penséis que dramatizo demasiado por uno o unos pocos fallos, cuando vosotros tuvisteis muchos más conmigo. No importa. Sólo: lo siento, perdón, sorry, üzgünüm, spiacente, désolé, etc...

Nunca me olvido de uno solo de vosotros, pero aquí no podría nombraros a todos, cientos, miles. Sólo daré unos nombres así al azar. Algunos quizá ya me han perdonado, otros no lo harán nunca, otros quizá no le hayan dado jamás importancia al tema, otros aún no se habrán dado cuenta o nunca lo harán, y a otros a lo mejor realmente nunca les he fallado, pero por si acaso...

A todos os he fallado alguna vez: amigos, compañeras de clase, hermanos, padres, compartidores de experiencias, titas, profesoras, maestros, abuelos, compañeras de viaje, amores platónicos, compañeros de piso, parientes de amistades, empleados/as, primas, vecinos, conocidos, desconocidas, cuñadas, compañeros de trabajo, antepasados, sobrinas, novias, etc, etc... Si algún día me volvéis a ver, sabed que me arrepiento de mis errores. Lo digo ya, lo dejo aquí escrito antes de que sea demasiado tarde y no lo pueda hacer (quien sabe si cuando pase el juicio final podamos encontrarnos).

Sé que sabréis perdonarme, porque en el fondo del todo, sabéis que no soy malo: Juan, Verónica, Carlos, Jesús, Cristina, Josefa, Ana, Rafael, Manuel, María Jesús, Ana, Pavel, Esther, Fernando, Irene, Dolores, José Antonio, (Desconocido), Patricia, Dani, Frasquito, Cristina, Montse... y podría seguir y dar una segunda vuelta: Beñat, Mari Carmen, Jesús, Ilu, Laura, Magdalena, Silvia, Manolo, Rafael, Puri, Mari Carmen, Juan Ramón, Mikel, Mari Carmen, Meri, Eduardo, Mercedes, (Desconocida), Eva, Marie, Alonso, Patricia, -... y de nuevo por tercera vez sacando nombres de la lista: Javier, Aida, Manuel, Purificación, Sara, Victoria, Juana, Luis, Carmen, Mari, Eli, Zairong, Joaquín, Misi, Carmen, Juan, Enrique, (Desconocido), Noelia, Quique, Rafael, (Por nacer), - ... Y ya sin responder a ningún campo en concreto, podría seguir y seguir: Antonio, Ramiro, Santiago, Ángel, Gema, Marisa, Pilar, Cristina, Anais... incluso Javi, yo mismo. A todos, siento haberos fallado alguna vez. Os deseo lo mejor.

Y por supuesto, no olvidéis dar las gracias, pedir perdón, ser amables, decir "por favor" y hacer todo lo felices que podáis a los que están a vuestro alrededor. Disfrutad de la vida, sonreíd y no falléis a nadie, pero menos aún a los que están a vuestro lado. Si no lo olvidáis, señoras y señores, si no lo olvidamos, amigos míos, seres humanos que pasasteis, pasáis y pasaréis por mi vida, entre todos habremos hecho del mundo un lugar mejor para vivir.


Por Cierto: A petición de numerosos lectores (concretamente "bat"), tengo que pedir disculpas por haber bajado últimamente a la mitad el número y el nivel de post reflexivos en esta bitácora. La falta de tiempo es la culpable, pero bueno, prometo ir terminando con las "series chorras" que estoy poniendo recientemente, y aplicarme de nuevo para recuperar el ritmo. ¡Gracias por la sugerencia!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

...Puede que lo importante no sea pedir perdón, sino no volver a fallar...

Javi dijo...

Sí, eso sería perfecto, en un mundo utópico en el que los humanos no fuéramos humanos.

De humanos es errar, de sabios es rectificar o al menos darse cuenta del error e intentar que vuelva a suceder las menos veces posibles.

En todo caso, todos tenemos que ser conscientes de que fallamos (pasado), fallamos (presente) y fallaremos.

Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo contigo y recalco la frase...INTENTAR QUE VUELVA A SUCEDER LAS MENOS VECES POSIBLES.

P.D: Muy bueno tu blog ;)