Rincones de Porcuna (1-Rinconcillos)
Día soleado, cuatro de la tarde, una de esas tardes primaverales tempranas, cuando el calor sofocante de estas tierras aún no ha llegado, cuando ya busca la sombra el perro y cuando los gatos se enroscan encima de algún fresquito cerviquillo, cuando el fresco airecillo aún deja intuir que hace sólo unos días cayó una granizada histórica. Hoy, Porcuna milenaria está donde siempre, encima de su cerro, esperando que la paseemos, que la pateemos, que la rodemos o la circulemos, impregnándonos del aroma de sus históricas calles, de sus empinadas cuestas, del olor de sus llanetes, de los saludos de sus gentes, de sus ruidos, de sus campanas, de sus colores, y en el fondo de toda su esencia, como maravilloso lugar que es.
A diario, decenas de porcuneros acuden a esa llamada, y salen a la hora de la siesta a andar, a San Marcos, a San Benito, a Jesús, a Alharilla, al Polideportivo, a la Cruz Blanca; a bajar la comida para continuar la jornada de tarde. Hoy, yo les he acompañado, y como aquí sólo vale la vista (y a veces el oído), aquí tenéis parte de lo que he podido recoger junto a ellos, y que os presentaré en varias humildes entregas. Rincones, detalles de Porcuna, algunos conocidos, otros misteriosos y extraños, pero en todos, Obulco, Ipolka, Bulkuna, simplemente, este viejo trozo de tierra, esta encrucijada de caminos, este lugar mágico, esta nuestra-vuestra casa:
Detalle del Barruelo, y calle Colón con el Arco de la plaza al fondo
Casa Grande de la calle Santa Ana, y subida empinada en calle Honda
Claustro del Convento de San Francisco (s. XVII)
Una antigua tradición, obligada por la falta de agua corriente que no llegó hasta hace unos 40 años, era la de ir a las fuentes con los cántaros para llenarlos de agua. Muchas de ellas aún están presentes en algunos llanetes. Y como paradigma de las mujeres cantareras, María Bellido Vallejos.
Fuentes del Llanete San Juan y de San Lorenzo (arriba), y fuente del Llanete Cerrajeros y estatua de María Bellido (abajo)
En el barrio de San Benito podemos encontrar aún algunos detalles de lo que fue la antigua ciudad romana de Obulco, en los restos arqueológicos encontrados y las excavaciones practicadas.
Columna, probablemente perteneciente a algún templo romano previo a la Iglesia de San Benito (a la derecha, nuestro patrón en la portada de su Iglesia)
Y aunque hay muchas imágenes más, las dejaremos para futuras entregas de estos Rincones de Porcuna. Os dejo 3 más de regalo, y nos vemos en la próxima:
Torreón en Plaza de la Constitución, Campana del Ayuntamiento y uno de los "Pinos Bonitos"
-Rincones de Porcuna (1-Rinconcillos)
-Rincones de Porcuna (2-Fechas)
-Rincones de Porcuna (3-Paisajes)
-Rincones de Porcuna (4-Escudos Varios)
No hay comentarios:
Publicar un comentario