Cosas que la histeria colectiva y la 'prohibicionitis' ya no me dejan hacer

Cosas que podría haber hecho en los 90 tranquilamente, y ahora no:

-Ya no puedo sentar sobre mis piernas a mi sobrina de 6 años en la playa y hacerle el caballito, porque si lo hago me llaman pederasta.

Una consecuencia de la ola de acusados de corrupción de menores, es que todo el mundo cree que muchos son pederastas, entonces hay presunción de culpabilidad en caso de duda. Que luego se enteren de que es tu sobrina, arregla algo, aunque sigue dejando muchas dudas... Ni a los niños dejan tranquilos.

-Ya no puedo sentarme tranquilamente a beber una litrona con una amiga en un banco de muchas ciudades andaluzas, porque está prohibido.

Puede que los fumadores dijeran que tampoco ellos pueden fumar tranquilamente en un bar, pero ellos sí molestan a otros. Yo sólo estoy en un banco junto a dos amigos a las 10 de la noche tomando una litrona. Al terminar echo a un contenedor la botella de cristal, y como no es muy tarde y además sólo estamos hablando, no molestamos a nadie. ¡No es botellón!, pero las leyes están para prohibir, así que nos aguantamos.
 
-Ya no puedo dejar pasar primero a una chica por una puerta, porque es probable que me llame machista.

Me ha pasado ya 2-3 veces que recuerde (tampoco son mayoría, eso sí). En un caso, yo tenía un mal día, y el tono agresivo de la "tipa" me hizo reaccionar mal: Como a pesar de lo machista que yo era, pretendía aprovechar para pasar antes, apartándola con el brazo, le dije: "vale, como somos iguales, quita de enmedio entonces, que yo iba antes". Seguí adelante, dejándola callada... En fin, cosas del lobby feminista.
 
-Ya no puedo darle tranquilamente al botón de grabar de mi cámara de vídeo en un sitio público, por miedo a grabar algo que cause que alguien me denuncie por intromisión de intimidad, derechos de autor o lo que sea.

A ver, puede que los paparazzi hayan hecho mucho daño a la sociedad, pero sólo estoy grabando el mundo, personas, cosas, animales, árboles, coches... mi única idea es intentar que quede plasmada la belleza que nos rodea, el devenir diario de la vida, que es preciosa. No estoy espiando a nadie, ni voy a publicar en internet una página web sobre vosotros... La histeria colectiva les hace pensar que soy algún tipo de enfermo que les está filmando con una oscura intención. ¡Si sólo grababa el edificio de detrás!

-Ya no puedo decirle a una madre que su niña de 13 años está muy guapa, porque me diría que soy un guarro degenerado.

A ver, mi madre lo ha dicho, a mí me han preguntado, y a la vista de una niña de 13 años a la que doblo en edad, con un vestido bonito, una piel suave y una cara ni muy guapa ni muy fea, pero con una sonrisa tímida; con un intento de ser condescendiente con la opinión general de la situación, digo que está guapa. ¡Dios mío, se la quiere beneficiar, la mira con lascivia, se sabía, guarro!
 
-Ya no puedo poner algo de música en mi tienda sin miedo a que venga un inspector de la 'asociación chunga esa que roba a pobres para dárselo a vividores' y me haga pagarle un canon absurdo.

No quiero lucrarme con ello, no voy a vender derechos, ni siquiera me gusta la música que pongo aunque entiendo que le pueda gustar a mis clientes, y obviamente no tengo una discoteca en la que pongo cubatas al abusivo precio de 10 euros (con eso no se meten). Sólo lo hago por dar "ambiente", por hacer más animada la mañana de algunas decenas de personas que entren hoy a comprar algo o sólo a mirar, por dar quizá una pincelada de color. En fin, a muchos sólo les quedará la música del aire acondicionado este verano (los que no tengan Fujistu, claro), porque a este paso, ni siquiera tendremos el de los dineros sonando al caer en la caja y el 'cling' de ésta, donde lo haya.

 -Ya no puedo comentar sin maldad que alguien tiene un poco de 'pluma', y ya está, sin que alguien acabe llamándome homófobo.

Siento volver a meterme en "el fregado gay" de nuevo, pero es un caso más, así que lo pongo. A ver, no pasa nada, el chico tiene pluma, es afeminado, punto, como podría ser muy tosco, tartamudo, gordo, flaco, ateo o lo que sea. El chico incluso me cae bien, es gracioso, es simpático y muy atento. Es sólo una palabra, en fin, no le estoy acusando de ladrón, y por supuesto, los hombres no me dan miedo (excepto los terroristas y algunos tipos de médicos que vienen hacia a mí a cortar cosas). Cosas del lobby gay.

-Ya no puedo decir 'buenos días' al entrar a un lugar sin que la gente me mire como a un bicho raro pedante que me creo más educado y mejor que ellos.

Esta es curiosa, porque a veces sí que le pasa a gente 'de poca alcurnia', que para hacerse la importante la ves que llega, se planta en un sitio, y como vea que no le hacen caso, espeta un mega-"buenos días", para que se vea lo grande que es y su educación. Quitando a estas criaturas, en general la gente va muy zombie y pasa mucho de todo, aunque es verdad que, aun no siendo Inglaterra (please, excuse me, good morning y tal) en general los españoles somos educados en ese sentido. Por desgracia muchas veces me he sentido avergonzado por haber sido educado, y eso me pone muy triste y hace bajar en mi percepción social a todos los del lugar, pero bueno, no pasa siempre ni en todos lados. Aquí no sabría el porqué, pero quizá el no llamar de "usted" a los profesores de instituto ha contribuido, miren que tontería...

 -Ya no puedo.... 

En fin, que son estas y más cosas que han acabado cambiando por ese "tiquismiqueamiento" de la sociedad, por ese "pitiminíamiento", por ese "refinado" al que la estamos sometiendo, cada vez más libre de chabacanería, de marranada, de caquita, ah no... que eso es justo lo que somos. Bueno, pues quizá para no reconocerlo buscamos por otro lado dar una mano de pintura prohibiendo, o volviéndonos locos viendo fantasmas donde no los hay. En todo caso, no olvido que aunque me gusta reparar en lo malo y lo que habría que cambiar, he de reconocer que cualquier tiempo pasado no fue mejor (en aquellos 90 no habría podido escribir este blog).