09 agosto, 2020

Confesando ser un chico malo

Pido disculpas de antemano por todo el daño que haya podido causar, pero hoy os voy a confesar por fin que soy un chico malo. Algunos ya habríais intuido algo, y otros quizá ahora aten cabos, mientras que puede que incluso más de uno se sorprenda enormemente y uno o dos lectores de Schopenhauer lo tenían por obvio.

Sí, confieso que soy un chico malo, y la mejor manera es confesar todas mis maldades y malicias, mis delitos, mis errores, mis flagrantes infracciones, y sin más dilaciones, y siendo valiente y con arrojo, aquí las recojo:

-Cuando voy conduciendo, ya sea moto, coche, bici, o yo mismo corriendo, y hay una paloma en mi camino, no freno, aunque tampoco acelero, pero de veras espero, que salga volando (hasta ahora siempre lo han hecho).
-Más de una vez me hice el enfermo en casa para no ir a clase, quizá para evitar algún examen o trabajo, haciendo trabajar al termómetro a destajo.
-Un par de veces he dejado caer accidentalmente el tique del supermercado al suelo antes de entrar al coche, incluso aprovechando la discreción de la noche.
-Una vez no me cobraron una de las 2 coca-colas de una cuenta, y me callé, quizá por si con eso saldábamos lo que me cobraron de más la otra vez.
-Una vez mi compañero fichó con mi tarjeta en el trabajo al salir, yo me fui antes, y poder tener unas horas más, qué más podría pedir.
-En rectas largas de limitación de 90, a veces cuando adelanto me quedo un rato a 110, vamos, un verdadero 'destroyer' de la carretera, ya sea en otoño o incluso en primavera.
-El otro día metí otro melocotón más en la bolsa, después de haber pesado los anteriores anteriormente, y sin que mi conciencia pueda decir que se arrepiente.


-Una vez cogí 2 caramelos de un mostrador, cuando me habían dicho que cogiera uno, pero yo cogí dos.
-Una vez jugando al parchís me conté 21 en vez de 20, porque así me comía otra más, a ver si colaba, y coló, y de esa forma la partida quedó ganada.
-Ayer me leí 20 páginas de un libro en la librería, eso que me ahorré, aunque seguramente en la vida lo compraría.
-Tengo 20 CD de música pirateada, me la grabaron hace muchos años, pero la mayoría aún no la tengo escuchada.
-Utilizo 6 meses las lentillas de 1 mes, y cuando el óptico me pregunta, el longui me hago, no sea que paquete me salga más caro.
-Mi hijo entró gratis hasta 3 veces a un parque de atracciones, porque mentíamos sobre su edad. Si nos llegan a pillar tendríamos que haber implorado piedad
-Una vez me quejé de más en el médico para que me pusieran mejor en el triaje, no sé si sirvió de mucho, pero al menos me hizo más corto el viaje.
-Una vez hice un post confesando ser un chico malo, y la mayoría de las cosas de la lista no eran mías. Así evitaba parecer un chico malo, por si acaso alguien pensara que lo parecía.


Bueno, pues confesado queda, perdonado estoy, ahora a seguir con mi lista de fechorías, felonías y tonterías, quién no ha sido un chico malo alguna vez, de forma ligerita o suave, como yo o mis inventos, si no, ¿tiene la vida color más allá de ese gris de la monotonía y la malditalma? Lo dudo, así que sed malos, que el tiempo apremia.

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