Lo prometido es deuda, contigo.

Lo prometido es deuda, y yo pago.
Una poesía prometí y así la hago.

Recordando ando, un lustro atrás
un sillón, un chocolate, nada más.

Sangre que marcaba un futuro a fuego
corazones palpitando, vendrían luego.

Idas y venidas, mensajes, muchos sms
y ahora son nada menos que 60 meses.

Idas y venidas, viajes furtivos
incluso paseando entre los olivos.

Playa o piscina, da igual, montaña o mar
lo importante sólo era juntos estar.

Daniela dicen que se llama, yo no sé
queda tanto, queda tan poco, ya veré.

Y cierto es, ya lo dijo la canción
que por aquel entonces nos dio su bendición:

Y en el momento que vi tu mirada
buscando mi cara, aquella madrugada.

Ese 20 de enero saliendo del tren
sin saber que todo iba a salir tan bien.

Me pregunté qué sería el resto de mi vida
sin ti, y en ese momento no vi otra salida.

Y desde entonces te quiero y te adoro
e incluso te vuelvo a querer, me enamoro.

Pero no es momento de cursilerías,
pues esto no es ninguna destilería.

De ron miel, de vodka caramelo, de malibú
con piña quizá, con una pajita de bambú

Vaya rima más forzada sí, tú dirás,
Ahí, junto a la estrella polar, pensarás

Pero puedo hacerlo mejor, también con malibú
bebiendo mientras suena "Mad About You"

Mejor, pero no perfecto, pues eso es imposible
no hay nada perfecto, pues eso sería horrible

Aburrido, singracia, no como tú, princesa,
de un barco grumetilla, de la armada francesa.

Buenos días pelandruscas, así de alto grito
no tenéis ya opciones, pues no estoy solito

Se alegrará esa eíta de ello, seguro
pues seguramente pensó que él era un tipo duro

Pero en el fondo sabe que no, que es tierno
que es calor de verano y frío de invierno

Como una fruta que madura al solecito
como el árbol talado que retoña, el eíto.

Sueño otra vez, sueño como otros años
sueño días y noches, sueño sin sábanas ni paños

Y quiero soñar, porque lo dijo aquel genio,
que los sueños eso son, y la vida es un premio.

Contigo