Pueblos pequeños, España rural y vacía, gentes que emigraron a las grandes y ricas ciudades, otros valientes de verdad que se quedaron para combatir el hambre y la despoblación, para mantener vivos esos lugares. El siglo XX fue una sangría que a muchos dejó al borde de la desaparición, con un puñado de habitantes a la espera de que el paso del tiempo acabara con todos ellos y dejara inhóspito el lugar.
El desarrollo ante todo, sin sostenibilidad alguna, el capitalismo, la modernidad, las urbes que lo fagocitan todo, que engullen las tradiciones que venían del campo, que despersonalizan a esas gentes que llegan y olvidan su cultura, sus raíces, quedando todo uniformado como si se tratase de unas simples franquicias que en cualquier lado son calcadas
Salen los políticos hablando para conseguir los votos también de los lugares incivilizados, inventando patrañas, que les van a dar tal o cual cosa, que van a estar pendientes de ellos, que va a haber mejoras que nunca llegan, pues el tiempo de las elecciones pasa rápido y todo queda en agua de borrajas.
Y así, uno tras otro se han despoblado del todo, y los que tenían 100 habitantes tienen cinco, y los que tenían 500 ahora no llegan a un ciento, y los de 1000 son un puñado, y los de 5000 superan el millar con apuros, y así sucesivamente, sin nada más que llevarse a la boca, sin nada más que intentar fomentar el turismo rural, el desarrollo sostenible y la ecología, como patas endebles que realmente no son riqueza, sino una ilusión desdibujada que apenas es capaz de fijar población. Y sí, ya hace 3 años hablé aquí de esa España vaciada, y todo sigue igual.
No, los de los pueblos pequeños no necesitamos limosna de la ciudad, de las instituciones que sólo gobiernan para ellas mismas. No tiene ningún sentido que haya más diputados elegidos por la provincia de Soria que por la de Madrid, tan importante es el número de habitantes como el tamaño, y además, la delimitación de provincias españolas se hizo precisamente con la idea de que fueran de un tamaño similar (no en todos los casos pasa, pero sí fue un poco la idea), entonces el hecho de que luego todos los habitantes se estén yendo a un lugar, no implica que haya que desploblar los demás y despojarlos de su poder de decisión. Es brutal, Soria tiene 2 diputados y Madrid 37, así es imposible combatir, es David contra 20 Goliaths...
Así, quisiera aprovechar este atril para lanzar varias plegarias, ruegos o peticiones que deberían ser escuchadas cuanto antes, axiomas innegociables para la España vaciada que habría de atender la España centralizada e hipertrofiada de las grandes capitales, pues sin el pueblo, nuestro país se muere, y a todos ellos, poltrona y sueldecitos funcionariales en mano, les trae al pairo y les importa un bledo, claro está:
1- El sistema de reparto de diputados ha de cambiar: Todas las provincias tienen que tener un mínimo de 5 diputados, y las ciudades autónomas de 2, y se establece un tope máximo de diputados por provincia que estará en 15.
Así, varias provincias aumentarían hasta 5 diputados, siendo 31 más a día de hoy, y Madrid y Barcelona bajarían a 20, siendo así 29 menos. Los dos restantes se reajustarían también quitando de alguna sobreestimada como Valencia o Alicante.
2- Obligatoriamente, todos los municipios de España tienen que contar todos los días con un médico de familia, un puesto de venta de pan, fruta, verdura, carne y pescado, una oficina bancaria, una farmacia, internet de banda ancha (que funcione), un servicio de taxi (o bus), sucursal de la administración pública, etc...
En caso de necesitar un médico itinerante por haber varias pedanías, nunca será el médico principal, sino que habrá un segundo médico para esta labor. El puesto de venta de comida y la oficina bancaria pueden ser itinerantes, pero debe haber al menos 1 hora diaria en cada pueblo.
La sucursal de la administración pública sería una persona con amplios conocimientos que estuviera al menos 4 horas por la mañana (y por las tardes en las pedanías si las hubiera), y que tendría acceso a internet y teléfono con acceso prioritario para ayudar a hacer cualquier gestión sin tener que ir a la gran ciudad.
3- Obligatoriamente, todos los municipios de España tienen que contar al menos cada 2 semanas con ciertos servicios de ocio. No me atrevo a soltarlos así como así, dejo a los expertos, pero podrían ser algo como un cine, una tienda de ropa, un concierto, un teatro, etc...
Son cosas itinerantes que podrían ir y venir cada una o dos semanas, haciendo que no tengan la necesidad vital de ir a la ciudad a conseguir ese entretenimiento. Parece una tontería, pero a veces es la diferencia entre irse o quedarse.
4- Se deduce a partir de hoy de las pagas extras de todos los funcionarios españoles un 5% para "solidaridad interprovincial", que estará destinado a pagar un extra a los funcionarios de la España vaciada. Así, se pagará un plus mensual de 300€ a todos los médicos, maestros, etc... que ejerzan en pueblos menores de 500 habitantes y un plus de 150€ mensual a los que ejerzan en pueblos menores de 5000 habitantes, siempre que lleven al menos 2 años allí y que los pueblos estén a más de 30 kilómetros de su capital
La idea es que a muchos les merezca la pena irse a un pueblo pequeño a ejercer (si es poco dinero, se aumenta la deducción de la paga y así se sube el plus). No tiene sentido que un médico que ejerce en su ciudad cobre lo mismo que el de la España vaciada.
5-El Estado bonificará a los ayuntamientos de pueblos menores de 1000 habitantes el IBI de todas las viviendas (para que los ayuntamientos puedan devolverlo a sus ciudadanos), toda compra de vivienda habitual en esos pueblos estará exenta de impuestos (siempre que se mantenga cierto tiempo empadronado allí) y habrá una deducción en la declaración de la Renta para todos ellos.
Se trata de que merezca mucho la pena comprar vivienda o irse a vivir a los pueblos, al tener impuestos bajísimos, pero sin que los ayumtamientos dejen de poder financiarse.
6-Se pone un impuesto a los peajes de las autovías que servirá para pagar arreglos de carreteras y caminos en la España vaciada.
Solidaridad interterritorial, no tiene sentido que cerca de la ciudad las carreteras sean mejores que cerca de un pueblo.
7-Se pone otro impuesto a las energéticas para financiar mejoras para la España vaciada, para evitar la probreza energética y a la vez también fomentar el desarrollo sostenible.
La luz, el agua y el gas deben funcionar igual que en la ciudad, y a la misma vez, hay que reforestar los bosques, limpiar los ríos, cuidar animales, etc...
8-Se pone una bonificación a la banca (o evitación del impuesto que ya tienen y del que tanto se quejan), según el número de oficinas o servicios de oficina itinerante que abras en pueblos que no lo tuvieran. A más oficinas nuevas abras, menos impuesto pagas, así no dudarán en hacerlo.
El objetivo es que haya "0 municipios" sin un servicio diario de oficina bancaria, por lo que al menos debería haber uno por pueblo, y además debería visitar una vez a la semana cada una de las pedanías existentes. Se deja plena libertad para competir a los bancos, entre ellos, aunque se hará un inventario de las necesarias y se abrirá un concurso o plan para ocupar todas ellas.
9-Se pone una tasa turística a nivel nacional no aplicable en la España vaciada, que servirá para financiar infraestructuras y proyectos en ella, y el mantenimiento de su patrimonio.
Los grandes monumentos reciben millones de visitas y por tanto millones de financiación, y son de ciudades con mucho presupuesto. No tiene sentido que cualquier edificio turísticamente residual en una ciudad pueda conseguir varios millones de euros para su rehabilitación, que podrían servir para arreglar la iglesia principal de decenas de pueblos, que no tienen ese presupuesto ni ellos ni su diputación... A partir de ahora, esa desigualdad se va a ver paliada.
10-Se aumenta la financiación a las federaciones autonómicas deportivas que inviertan en la España vaciada.
Se articula fácilmente: los pueblos pequeños tienen derecho a una instalación y una equipación, exactamente igual que los miles de clubes de barrios de ciudades.
11- Se pone un impuesto a la compraventa de viviendas y al patrimonio, para invertir en la rehabilitación de viviendas de la España vaciada (en algunos casos compra a los propietarios para usarlas para atraer gente y en otros en forma de subvenciones).
Será el propio estado el que compre y arregle viviendas y las saque a alquiler o venta para personas que vengan a vivir. Además ayudará a rehabilitar las que hay.
12-Las empresas con sede en ciudades de más de 100.000 habitantes recibirán una gratificación de 500€ por empleado, por cada año que lleve teletrabajando en la España vaciada a más de 100 kilómetros de la sede.
Esta está muy clara: hay que fomentar el teletrabajo como gran medida de ahorro, y de camino como fuente clara de habitantes para los pequeños pueblos.
13- ... se me ocurren muchas más, pero me eternizaría en este pequeño artículo... Simplemente he de decir que hacer un decálogo con 10, con 100 ó con 1000 medidas no tiene sentido si luego no las implementas, que es lo que les pasa a los gobiernos, sean los amantes del capitalismo y la ciudad del PP y VOX, o los hippies y amantes de la naturaleza y los pueblos del PSOE y Podemos (es la idea que a veces unos y otros nos dan). Nada, todos son iguales, no hacen ni harán nada, porque saben que los votos que ganan las elecciones son los de las ciudades, y por eso jamás cambiarán el punto 1...
Del total de 8131 municipios que hay en España, 7300 tienen menos de 10.000 habitantes. No tiene ningún sentido esa infrarrepresentación política, mediática o social, cuando son la España mayoritaria, no lo olvidemos.