Adiós al último de los grandes: Beckenbauer
Será la llamada crisis de los cuarenta, o quizá de los cincuenta, quién sabe, pero es en estas épocas en las que uno puede ya echar la vista atrás porque no sabe si echándola adelante lo hará muy lejos.
Total, que pensaba estos días que yo crecí en un mundo, en un planeta azul, en el que Di Stéfano, Pelé, Cruyff y Maradona estaban vivos, y también los "quinto Beatle" Beckenbauer y Bobby Charlton. Incluso los mejores de España a nivel histórico lo estaban: Amancio, Gento, Zarra, César, Aragonés, Ramallets, Kubala o Luis Suárez.
Hoy, bastantes años después de aquellos en los que yo crecía, todos ellos han desaparecido para siempre, sin más, quedando en el recuerdo, en un gran y mítico recuerdo, pero sin que podamos ya ir a preguntarles nada sobre su gloria, pudiéndonos agarrar sólo a unos "blanquinegrinos" vídeos en los que las respuestas van a ser ya siempre las mismas, las que dieron en su momento... Toda esa gloria permanecerá siempre, pero no es lo mismo ver aquellos viejos partidos sabiendo que hoy siguen entre nosotros, como no es lo mismo ver una película sabiendo que los actores no existen o una canción, pintura, escultura... sabiendo que tal o cual artista ya nunca podrá repetir o intentar repetir algo parecido.
Un escalofrío te recorre al planteártelo, al pensar que todos estaban a la vez en ese mundo contigo y hoy ya no lo están, parecido a cuando ves aquellos vídeos de los Lumiére, aquellas fotos de primeros del siglo XX, esas películas en blanco y negro en las que ni podemos agarrarnos ya a pensar "bueno, al menos los niños sí pueden seguir vivos", porque no...
Esta semana se fue para siempre Franz Beckenbauer, casi de la misma quinta de muchos de ellos, pero que recordaba mucho más joven que tantos, y lo era, pues no llegó siquiera a los 80. No va esta entrada de él, pues es una excusa, pero fue claramente el mejor futbolista alemán de la historia, y uno de los 10-15 mejores a nivel mundial, siendo también uno de los 5 mejores defensas, esto último sin discusión alguna. En cierta manera nos empieza a dejar ya huérfanos del todo a aquellos niños que crecimos conociendo todos esos nombres de glorias que acababan de retirarse y que seguían resonando. Nombres como los del Torpedo Müller, Lev Yashine, Bobby Moore, Eusebio, aparte de los antes comentados...
Es básicamente lo mismo que para un niño nacido en el 2000 que escuchara nombres recién retirados como Zidane, Romario, Stoichkov, Bergkamp, Batistuta, Matthaus, o españoles como Luis Enrique, Zubizarreta, Hierro, Guardiola, Butragueño, Julio Salinas... Para ese niño o niña, serían grandes glorias que aún resonaban y cuya ascendencia conocía, lo mismito que para ese crío del 2020 para el que Xavi, Cristiano Ronaldo, Messi, Luis Suárez, Iniesta, Griezmann, Neymar, Casillas o Ronaldinho no son más que viejas glorias, en un paso inexorable del tiempo exactamente igual que el que a mí, niño de los 80 me ha hecho perder a muchas de esas glorias de los 60 y 70.
No hice en su momento un artículo similar al de los actores, para los futbolistas, pero básicamente sería lo mismo que ya hice en su momento para los viejos actores españoles que ya se nos fueron todos y recientemente para los extranjeros, que ya han comenzado a irse y lo habrán hecho del todo en una década.
La rueda nos dice que los que un día son "los grandes" o "el último de los grandes", obviamente son sustituibles con el tiempo, y para las siguientes generaciones también se irá un día "el primero de los grandes que nos deja", sin que ni siquiera sean conscientes de que algún día hubo otros grandes antes de nacer los actuales.
Hubo un Hollywood en blanco y negro, glorioso y celuloso, y hubo también un fútbol premundiales que se jugaban con balones que destrozaban las cabezas y sin cambios ni tarjetas, y en todos ellos hubo grandísimas glorias, quizá con muchísima más repercusión que las actuales, y habrá otro fútbol y otro Hollywood a finales del siglo XXI que casi no recuerden ya todas esas estrellas actuales, y mucho menos las de principios del XX, nueva ley de vida.
Y así, despidiéndome del 'kaiser', el reinventor de la posición de 'líbero', el que ganó mundiales como jugador y entrenador y lo fue todo en el Bayern de Munich, recuerdo de nuevo con un artículo de crisis de los cincuenta que algún día nuestros grandes y nosotros mismos también seremos los homenajeados. Hasta entonces, gloria a esas nuestras glorias, pasadas, actuales y por llegar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario