Cuidado con nuestra identidad digital

Todos dejamos fotos, comentarios, vídeos u opiniones sobre temas algo comprometidos en la red. A la misma vez, otros dejan fotos, comentarios, vídeos u opiniones sobre nosotros en la red. En consecuencia, otros muchos ven esos comentarios, vídeos, opiniones y fotos... No lo hacemos con cuidado, para nada, pero algún día, no sé cuándo, pueden influir en nuestro futuro.

Algunos casos reales:

-En una entrevista de trabajo, a la pregunta de si tiene usuario en Twitter y LinkedIn y las usa con frecuencia, el entrevistado dice sí. El entrevistador coge un ordenador, lo enciende, le pide su usuario, entra en el Twitter y ve que lleva 8 tuits... LinkedIn ni lo miró...  Obviamente no fue contratado...

-A la hora de dar la condicional a un encarcelado, se busca información sobre él en la red. Debido a ciertos comentarios hechos en Facebook con opiniones muy de extrema izquierda, finalmente se decide no concederla de momento...

-Un adolescente comenta en el Fotolog de unos amigos sobre una chica, con frases del tipo "esa gorda, ya hay que tener estómago para ser su novio"... Sólo 3 años después, en el último año de instituto, la chica es mucho más atractiva que antes y tiene bastantes pretendientes. El chico parece no acordarse de lo que pensaba antes de ella y le pide salir. Las amigas le advierten de lo que él dijo en su momento y por supuesto le dice que no...


En definitiva, que hemos de cuidar lo que decimos aquí, en este Ágora cibernético, pues no sabemos cuándo ni por qué esa información será utilizada contra o a nuestro favor. Al menos, intentemos que sólo pueda ser utilizada a nuestro favor, así que cuidémosla, incluso más importante: cuidémosla desde la adolescencia, pues nadie está a salvo de tener fotos comprometedoras de esa época, pero sí que todos podemos evitar en la medida de lo posible que trasciendan por ahí. Cuidemos nuestra identidad digital como cuidamos la real, porque realmente ya son lo mismo.